Personajes Garza
El profesor Manuel Toledo
Por Mabel P. Azpeitia
Fotografía: Carlos Sánchez
Uno de los personajes más queridos en la Licenciatura en Comunicación, del Instituto de Ciencias Sociales y Humanidades (ICSHu), es sin duda alguna es el maestro Manuel Toledo Molano, quien indiscutiblemente ha dejado una huella en los estudiantes que aún se encuentran en las aulas, así como a varios egresados.
Gran maestro y amigo
Debido a la gran relación maestro-alumno que logra forjar con el estudiantado, estoy casi segura de que si le preguntan a cada uno de sus ex pupilos tendrían una anécdota a cerca de él. Quienes hemos estado bajo su instrucción lo recordamos por siempre ser una persona muy versátil tanto en su personalidad como en el aspecto físico: las veces que se ha dejado crecer el bigote, cuando trae el cabello corto a comparación de como acostumbra a usarlo en ocasiones, y, como olvidar su clásica barba que acaricia mientras analiza las preguntas que le hacen y se pierde en sus propios pensamientos.
Se caracteriza por ser una persona amable y siempre dispuesta a escuchar tanto a sus colegas como a los jóvenes universitarios, quienes siempre lo saludan cordialmente cuando lo encuentran por los pasillos de la licenciatura.
Si bien, sus clases son totalmente teóricas, el maestro Toledo se encarga de hacerlas más amenas, complementándolas con comentarios, participaciones y desde luego retroalimentación. Es una persona demasiado inteligente y siempre tiene una respuesta certera, concreta y eficaz para cualquier duda que uno tenga. Con él puedes tener una plática de lo más trivial hasta hablar de alguna problemática seria y de gran relevancia.
Su alma máter es la Universidad de la Amistad de los Pueblos que se encuentra en la federación rusa. Es profesor por asignatura en la carrera antes mencionada y actualmente imparte tres materias: Historia del periodismo nacional y regional, Teorías del lenguaje y Teorías clásicas de la comunicación.
Su experiencia laboral abarca desde una revista de índole turístico, corrector de estilo en una agencia, traductor, en el Colegio de Bachilleres, catedrático en la Universidad Nacional Autónoma de México y, desde luego, su actual empleo en la máxima casa de estudios hidalguense.
Forjador de más de 15 generaciones de comunicólogos
Es pionero de la Licenciatura en Comunicación en esta institución y ha instruido a todas las generaciones egresadas desde que este programa se puso en marcha.
Es decir, desde el año 2001 se encuentra laborando para la Universidad y ha visto como se ha ido desarrollando la carrera desde que fue aprobada por el Honorable Consejo Universitario, el 27 de octubre de 2007, para formar parte de la oferta educativa.
En entrevista con Gaceta UAEH narró algunas anécdotas, muchas de ellas tuvieron qué ver con los cambios ocurridos en la licenciatura, sin embargo, la más trascendente para él fue cuando la carrera en un inicio se encontraba en la Escuela de Medicina, localizada en la Calle de Ramírez Ulloa, y posteriormente tuvieron que trasladarse a las instalaciones del ICSHu, que en ese momento eran totalmente nuevas.
Debido a que esto provocó gran nostalgia tanto para los alumnos como para los docentes, el profesor Manuel Toledo llevó acabo un ejercicio de “desprendimiento”: todos tuvieron que arrojar y deshacerse de algo tangible para simbolizar el fin de una etapa para dar paso a una etapa totalmente nueva que estaba por venir. En la dinámica recordaron recordando cómo era compartir el mismo lugar con personas que se dedicaban a estudiar algo totalmente diferente a su rama, inclusive, luego de estar casi cuatro años en Ramírez Ulloa, les costó adaptarse al ICSHu en marzo de 2004 a causa de las ideologías que tenían tanto los futuros comunicólogos como los académicos.
Recordó las primeras veces que utilizó una computadora portátil y un proyector con miles de cables, el cual fue parte del proceso de incorporación de las nuevas tecnologías para hacer más dinámica la enseñanza. Narró que después de intentar usarlos terminaba dejándolos para volver a los viejos métodos, aunque después de un tiempo logró adaptarse a estos cambios por necesidad y por gusto.
Amante de la docencia y la Comunicación
Durante la charla reconoció que una de las cosas que más disfruta es el contacto con alumnos y con el conocimiento, pues considera que su trabajo es de suma importancia para impulsar el criterio de los futuros comunicólogos, de ahí radica el gusto que tiene por irse actualizando, leyendo e informándose sobre las cuestiones de índole político, social y académico para así poder reforzar los conocimientos con los que él cuenta y que comparte con el alumnado.
Por último, mencionó que espera que el impacto que tiene en la comunidad universitaria sea positivo y busca inspirar a la gente para que vea que hay diferentes formas de ejercer tanto la carrera como la docencia. De la misma manera, espera que los procesos de enseñanza-aprendizaje que lleva acabo ayuden a los alumnos a adquirir las habilidades necesarias para su formación profesional.