Glifos de influencia prehispánica en el acueducto de Zempoala

Resumen

Este artículo presenta los glifos representativos de influencia prehispánica en el Acueducto de Zempoala, incorporando los de las arquerías de Tepeyahualco y los de las Haciendas de Arcos y de Tecajete, en el municipio de Zempoala, estado de Hidalgo.

Palabras clave: Acueducto de Zempoala, glifos, representaciones prehispánicas.

Abstract

This paper presents the glyphs representing pre-Hispanic influence in the Acueducto de Zempoala, incorporating the Tepeyahualco arcades and of the Haciendas de Arcos and Tecajete, in the municipality of Zempoala, Hidalgo state.

Keywords: Acueducto de Zempoala, glyphs, prehispanic representations.




El Acueducto de Zempoala es una obra monumental iniciada en el año de 1555 y terminada 17 años después en 1572[1]. En su construcción intervinieron cientos de indígenas otomíes y nahuas que lograron levantar imponentes arquerías para llevar agua a Otumba. La organización y dirección estuvo a cargo del fraile franciscano Fray Francisco de Tembleque.

Los glifos del Acueducto de Zempoala, tanto los de la arquería de Tepeyahualco como los de las Haciendas de Tecajete y de Arcos han recibido, por desgracia, poca atención. El capuchino Francisco de Ajofrín, de la Sagrada Congregación de Propaganda FIDE, visitó Zempoala en el siglo XVIII y dibujó algunos de los glifos de la arquería de Tepeyahualco. Posteriormente, el historiador Ángel Ma. Garibay fue el primero en tratar de interpretarlos[2].

Un registro realizado hace unos años dio a conocer la presencia de aproximadamente 652 glifos,[3] de los cuales 607 están dibujados con cal en los arcos de Tepeyahualco, 25 están grabados en la Hacienda de Tecajete y más o menos 20 se encuentran grabados en la arquería de la Hacienda de Arcos.[4] Muchos motivos se parecen, pero no son exactamente iguales ya que presentan leves diferencias y todos se distribuyen de manera aleatoria, es decir, no existe un patrón de distribución. Es de suponer que todos a casi todos los glifos del acueducto son de influencia prehispánica debido a la conquista reciente, sin embargo, existen algunos motivos que son claramente hispánicos como las letras.

En este trabajo presentamos un resumen de los glifos de influencia prehispánica en las arquerías del Acueducto de Zempoala, indicando sólo un ejemplo representativo para cada caso.

Glifos del Acueducto de Tepeyahualco

Círculos

Los círculos pueden ser sencillos o más elaborados con motivos al interior y al exterior.

 

 

- con motivos al exterior.

 

 

Generalmente estos motivos tienen rayos o líneas al exterior, que quizá pudieron representar soles y algunos presentan extrañas extensiones. El sol fue en la cosmovisión prehispánica el dios dador de vida y su culto, desde tiempos antiguos, se relaciona a los ciclos agrícolas. El sol o Padre Viejo, entre los otomíes, era además el dios del fuego.[5]

 

 

- con cruces

 

 

Estos círculos presentan cruces al interior, que se dibujaron de forma sencilla o rellenando parte del círculo y colocando un punto en el centro, en otros casos son círculos dobles con divisiones interiores. Los círculos divididos en cuatro pueden significar el universo dividido en cuatro regiones o rumbos, simbolizando el signo nahui ollin, cuatro movimiento. También pudiera ser la rodela de Quetzalcóatl en forma de cruz.[6] Para los teotihuacanos, Quetzalcóatl se relacionaba a la fertilidad de la tierra, mientras que los toltecas lo vincularon con la estrella matutina y vespertina, es decir, Venus.

 

 

- con aspas

 

 

Estos motivos, a diferencia de los anteriores, presentan aspas, como espirales.

 

 

- con gorros cónicos

 

 

Estos glifos, en forma de V en su interior, con una especie de anillo que lo rodea y rayas o pequeños círculos a sus lados, representan a Quetzalcóatl, como dios del viento, y es uno de los atributos de esta deidad con su tocado cónico o yopitzontli.[7]

 

 

- a medio llenar

 

 

Estos motivos podrían suponer la representación de la luna en sus diferentes fases, aunque como veremos más adelante, la luna también se dibuja en forma de U. Sus fases señalan los diferentes momentos de la fermentación del pulque.

 

 

- con puntos al interior

 

 

Son círculos simples o dobles con círculos o puntos al interior. Quizá representen formas celestes.

 

 

- con estrellas y puntos al interior

 

 

Estos son quizá unos de los motivos mejor realizados. Las estrellas al interior de los círculos, de seis y ocho picos, están intercaladas con pequeños puntos, que pudieran ser estrellas. Estos, al igual que los anteriores, pueden indicar formas celestes o universos.

Volutas

 

 

 

Las volutas se presentan solas o al interior de círculos. Pueden indicar la luna, aunque Garibay señala que este signo se halla en la ropa de las diosas madres, quizá en asociación a la Madre-luna. La luna se relacionaba también con el agua y tenía influencia para generar tormentas o inundaciones.

Círculos dobles con elementos al interior

 

 

 

Esta categoría de motivos presenta volutas al centro, variaciones con espirales y otros elementos como círculos, líneas y puntos.

Escudos

 

 

 

Los chimallis o escudos se dibujan como círculos con cruces al interior y un punto al centro, con extensiones a base de líneas y, en algunos casos, con puntas, indicando flechas. Este motivo representa la guerra, sobre todo si están indicadas las flechas atravesadas.

Según la Relación de Cempoala, los cempoaltecas tenían guerra con los de Tlaxcala y Huejotzingo, y peleaban con macanas y petos de algodón, y usaban mantas, bragueros, camisas y zaragüelles. Algunos llevaban zapatos y sombreros.[8]

Caras

Estos motivos parecen indicar la cara humana, con círculos a manera de ojos y una línea, círculo o rectángulo indicando la boca. Pueden ser:

 

 

- caras simples

 

 

 

 

- caras con extensiones exteriores

 

 

En este caso, las caras presentan extensiones a manera de un par de antenas. Estos glifos con sus variantes pueden indicar la representación del Señor de la región de los muertos, el Mictlantecuhtli, o bien, el signo miquiztli, la muerte, del Tonalpohualli o calendario ritual.[9]

Universos

 

 

 

Los llamados “universos”, son quizá los motivos que presentan más variaciones, pueden verse como curvas concéntricas que dividen al círculo con un círculo pequeño o una media luna en uno de sus lados, y del otro una serie de líneas paralelas.

Ángel Ma. Garibay identificó estos glifos con la representación del universo,[10] donde se marca la vía láctea por medio de franjas oblicuas y perpendiculares, y una estrella que pudiera ser Venus, dibujada como un círculo, aunque a veces se presenta una media luna.

Gorros cónicos

 

 

 

La base de estos motivos es el círculo, del cual se coloca arriba un trapecio y más arriba un motivo en forma de V invertida. En algunos casos el círculo es doble y en la base hay extensiones.

Jarros

 

 

 

Los jarros pueden presentarse solos o al interior de círculos. Algunas veces se observan asas y soportes. En el interior de algunos de ellos existe una pequeña voluta, indicando que contiene pulque, la bebida ceremonial

Incensarios

 

 

 

Los incensarios se muestran como dos trapecios invertidos formando el cuerpo y a veces con soporte. Estos objetos fueron empleados en tiempos prehispánicos básicamente en ceremonias religiosas.

Medias lunas

 

 

 

Estos motivos se dibujan en forma de la letra U. El grupo otomí adoraba a la luna o Madre Vieja, en contraposición con el sol o Padre Viejo. La luna se relaciona con la producción de pulque, donde sus diferentes fases indican los momentos de la fermentación del líquido.

Mariposas

 

 

 

Entre los teotihuacanos y los mexica, la mariposa o papalotl fue objeto de culto. Se representó en grabados en piedra, mantas, sellos, códices y tocados y escudos de los guerreros. La mariposa se asoció al fuego y a la guerra, y es el símbolo del movimiento.

Pedernales

 

 

 

Estos cuchillos fueron usados extensamente en tiempos prehispánicos y los decorados quizá tuvieron un uso ritual.

Flechas

 

 

 

Existen gran variedad de tipos de flechas, unas veces muestran una fisga en uno de sus extremos. Quizá estos motivos, al igual que los escudos, estén relacionados con la guerra.

Glifos del Acueducto de la Hacienda de Tecajete

Los trazos de los grabados en la Hacienda de Tecajete son variados, es decir, se nota diferente factura, ya que unos presentan líneas delicadas mientras otros son más toscos, incluso unos grabados llegan al altorrelieve.

Círculos diversos

 

 

 

Estos círculos pueden ser sencillos o dobles, con motivos diversos al interior.

Gorros cónicos

 

 

 

Estas figuras son semejantes a las mostradas en la arquería de Tepeyahualco.

Universo

 

 

 

En la arquería de Tecajete sólo se observa un motivo de universo, parecido a los encontrados en Tepeyahualco.

Caras

 

 

 

Las caras se dividen en dos tipos: 1) círculos dobles con ojos, nariz y boca al interior, indicados por medio de puntos y líneas, y 2) círculos divididos por líneas paralelas que enmarcan dos círculos más pequeños.

Casas

 

 

 

Estos motivos sólo se localizan en la arquería de Tecajete y es notable que uno de estos muestre la leyenda OTOSA CALI en su parte superior, calli significa casa en náhuatl. Los dibujos parecen representar más bien templos, con una escalinata frontal y un techo sostenido por columnas de claros rasgos indígenas

Pez

 

 

 

El pez es también un motivo único en la arquería de Tecajete. En la vecina Epazoyucan, la población tenía que tributar a los mexicas cada ochenta días cuarenta peces y cuarenta ranas,[11] por lo que es posible que antiguamente en la región abundaran este tipo de animales acuáticos. Joaquín Galarza propone que el pez indica vigilia o ayuno.[12]

Bandera

 

 

 

De nuevo otro motivo único en esta arquería, el cenpantli o bandera representa el número veinte, que era la base del sistema numeral entre los grupos de filiación nahua. Este elemento se encuentra representado, sobre todo, en la Matrícula de Tributos y el Códice Mendoza, indicando las cantidades que los pueblos sojuzgados debían tributar a Tenochtitlan.

Cempoala viene de la palabra náhuatl “Cempoalli”, es decir, veinte o la cuenta completa de los dedos. Con el final lan, variante de tlan, significa “cerca de la cuenta o de los veintes”,[13] por lo que seguramente este glifo hace referencia al lugar. La Relación de Cempoala señala que los pobladores de la región adoraban a varios ídolos, entre ellos a Huitzilopochtli, Quetzalcóatl y Tezcatlipoca, y que hacían sus ceremonias cada veinte días.[14]

Juegos de pelota

 

 

 

Es interesante la presencia de dos juegos de pelota en la arquería de la Hacienda de Tecajete, y que uno de ellos sea el único motivo que se ubica en el lado opuesto de la misma. Es posible que los grupos indígenas del siglo XVI de esta región hayan grabado estos motivos indicando que en tiempos pasados se realizaba esta práctica ritual.

Pedernal

 

 

 

En este caso el pedernal presenta una base cuadrada con divisiones y pequeñas líneas en la parte inferior.

Jarro

 

 

 

Este motivo, con asas (una circular y otra triangular), debió representar el pulque, como bebida sagrada.

Volutas

 

 

 

Observamos sólo dos casos de volutas en esta arquería, una de ellas atravesada por una línea. Como vimos, estos motivos pueden representar a la luna.

Glifos del Acueducto de la Hacienda de Arcos

Los glifos de la Hacienda de Arcos presentan una factura menos elaborada en comparación con los glifos de Tepeyahualco y los de la Hacienda de Tecajete, además son menos en cantidad.

Círculos

 

 

- con motivos al interior

 

 

Al igual que en las descripciones anteriores, pueden indicar los cuatro rumbos del universo.

 

 

- a medio llenar

 

 

Este círculo fue grabado y también pintado, ya que se empleó la cal para dibujar la mitad del círculo. Como vimos, puede representar una fase lunar.

 

 

- con gorro cónico

 

 

Es la representación de Quetzalcóatl, en su advocación de dios del viento.

Gorros Cónicos

 

 

 

Asociado también a Quetzalcóatl, estos motivos son de trazo sencillo.

Cara

 

 

 

Simboliza al dios de la muerte Mictlantecuhtli.

Universos

 

 

 

Presenta las mismas características de los motivos que representan universos en las arquerías anteriores.

Incensario

 

 

 

Este incensario muestra un trazo sencillo.

Pedernal

 

 

 

Este motivo es más simple que los encontrados en las demás arquerías.

Interpretación de los glifos

Ángel Ma. Garibay identificó a los glifos como una forma de marca o sello del artesano: “los signos sobre los arcos de Otumba son marcas de los picapedreros, para distinguir su trabajo del de los demás artesanos. La razón para hacerlo puede ser la necesidad de saber de qué región, o de qué persona proviene la realización del labrado”.[15] Es así que según Garibay, los glifos representan los nombres de los artesanos o de los pueblos de los que procedían. Él también deja ver que los glifos tienen un simbolismo puramente prehispánico.

Con esta idea, Víctor Ballesteros,[16] repite lo dicho por Garibay, acerca de que los glifos pueden significar los nombres de las comunidades, las cuadrillas de los trabajadores o los nombres propios de cada uno de ellos, y sugiere que otros fueron signos astronómicos usados por los indígenas. Se ha propuesto también a manera de hipótesis que algunos glifos muestren la manera en que se comprobaba la cantidad de trabajo que cada persona o comunidad tenía que aportar para la construcción del acueducto.[17]

Es claro que algunos de los glifos representan signos astronómicos, como los identificados como universos, soles y lunas. Muchos de ellos, como señalamos, muestran elementos prehispánicos como flechas, juegos de pelota, gorros cónicos, chimallis o escudos, casas y bandera, que indican que los trabajadores que construyeron el acueducto mantenían, en aquellos momentos tempranos de la conquista, su propia ideología y cosmovisión indígena. Es interesante anotar que no encontramos elementos cristianos, como cruces o iglesias, aunque Joaquín Galarza llega a identificar algunos dibujos con símbolos de esa religión.

En efecto, el hecho de que se hayan dibujado y expresamente colocado estos motivos en el Acueducto de Zempoala nos habla de que sus autores tuvieron la intención de perpetuar su memoria, afianzar su identidad y reforzar su concepción ideológica y cosmológica, en un periodo en el que necesitaban hacerlo frente a la imposición de una nueva religión.

Es nuestro deber proteger y conservar este legado patrimonial, único en su género.

Bibliografía

Ballesteros G., Víctor M.

  • “Síntesis Histórica” en Zempoala. Monografías del Estado de Hidalgo 1. Universidad Autónoma de Hidalgo, Hiram Bravo Barrientos (coord.), Dirección de Investigación Científica y Tecnológica. Pachuca, Hgo., 1990. pp. 13-47.

Ballesteros García, Víctor Manuel.

  • La pintura de la relación de Zempoala de 1580. Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo, Patrimonio Cultural Hidalguense. Pachuca, Hgo., 2005.

Galarza, Joaquín.

  • Estudios de escritura indígena tradicional azteca-náhuatl. AGN; CEMCA. Col. Manuscritos Indígenas Tradicionales. México, 1979.

Garibay K., Ángel Ma.

  • “Glifos en los arcos de Otumba”, en: Figuras y episodios de la Historia de México. El Padre Tembleque. Octaviano Valdés, Editorial Jus, No. 98, 2ª. edición, México, 1961.

González de Cossío, Francisco (prólogo).

  • El Libro de las Tasaciones de la Nueva España. Siglo XVI. Archivo General de la Nación, México, 1952.

Lorenzo Monterrubio, Antonio, Carmen Lorenzo Monterrubio y Arturo Vergara Hernández.

  • Catálogo del Patrimonio Cultural del Estado de Hidalgo. Región 1. Tomo 2. Consejo Estatal para la Cultura y las Artes de Hidalgo. México, 1998.

Lorenzo Monterrubio, Carmen.

  • “Los glifos del Acueducto de Zempoala. Nuevos datos, nuevas interpretaciones”. Ponencia presentada en el IX Coloquio Internacional sobre Otopames. Universidad Veracruzana, Xalapa, Ver. 12 de noviembre de 2007.

Macazaga Ordoño, César.

  • Nombres geográficos de México. Editorial Innovación, S. A. México, 1979.

Musset, Alain.

  • “El acueducto de Zempoala. Las respuestas de fray Francisco de Tembleque”, en: Historias 19. Dirección de Estudios Históricos, INAH, México, 1988. pp. 81-96.
  • “Relación de Cempoala, Epazoyuca y Tetliztaca”, en: Relaciones Geográficas del siglo XVI: México. Edición de René Acuña. Tomo primero, UNAM, Instituto de Investigaciones Antropológicas. México, 1985. pp. 67-93.

Vergara Hernández, Arturo.

  • Un Viaje por el Acueducto de Zempoala. Instituto Hidalguense de la Cultura, Gobierno del Estado de Hidalgo, México, 1991.



[a] Profesora Investigadora de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo

[1] Alain Musset. “El acueducto de Zempoala. Las respuestas de fray Francisco de Tembleque”, en: Historias 19. Dirección de Estudios Históricos, INAH, México, 1988.

[2] Se tiene noticia que Joaquín Galarza realizó un estudio de los glifos pero, por desgracia, no lo publicó.

[3] Ver Carmen Lorenzo Monterrubio. Los glifos del Acueducto de Zempoala. Nuevos datos, nuevas interpretaciones. Ponencia presentada en el IX Coloquio Internacional sobre Otopames. Universidad Veracruzana, Xalapa, Ver. 12 de noviembre de 2007.

[4] No fue posible hacer un registro detallado en la Hacienda de Arcos, debido a la presencia de una pequeña laguna que inunda la arquería.

[5] Ver, por ejemplo, las obras de Pedro Carrasco o Jacques Galinier.

[6] Ángel Ma. Garibay K. “Glifos en los arcos de Otumba”, en: Figuras y episodios de la Historia de México. El Padre Tembleque. Octaviano Valdés, Editorial Jus, no. 98, 2ª. edición. México, 1961. p. 180.

[7] Ángel Ma. Garibay K. “Glifos en los arcos…”, p. 180.

[8] “Relación de Cempoala, Epazoyuca y Tetliztaca”, en: Relaciones Geográficas del siglo XVI: México. Edición de René Acuña. Tomo primero, UNAM, Instituto de Investigaciones Antropológicas. México, 1985. p. 78.

[9] Ángel Ma. Garibay K. “Glifos en los arcos…”, p. 183.

[10] Ángel Ma. Garibay K. “Glifos en los arcos…”, p. 182.

[11] Francisco González de Cossío (prólogo). El Libro de las Tasaciones de la Nueva España. Siglo XVI. Archivo General de la Nación, México, 1952, p. 181-182.

[12] Estudios de escritura indígena tradicional azteca-náhuatl. AGN. CEMCA. Col. Manuscritos Indígenas Tradicionales. México, 1979. p. 34.

[13] César Macazaga Ordoño. Nombres geográficos de México. Editorial Innovación, S. A. México, 1979, p. 43.

[14] “Relación de Cempoala…”, p. 76.

[15] Ángel Ma. Garibay K. “Glifos en los arcos…”, p. 172.

[16] Víctor M. Ballesteros G. “Síntesis Histórica” en Zempoala. Monografías del Estado de Hidalgo 1. Hiram Bravo Barrientos (coord.). UAEH. Pachuca, Hgo. 1990. p. 30, y Víctor M. Ballesteros G. La pintura de la relación de Zempoala de 1580. UAEH. Pachuca, Hgo. 2005. p.26.

[17] Arturo Vergara Hernández, comunicación personal.