Dirección de Comunicación Social, 08/Febrero/2024
Boletín Informativo UAEH No. 60
*La Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo aloja alrededor de cuatro mil piezas fósiles
*Se puede solicitar al Área Académica de Biología de la institución el acceso para conocer el trabajo de las y los paleontólogos universitarios
Pachuca de Soto, Hidalgo.- “Para entender cómo se ha configurado el planeta, el comportamiento de aquello que lo habita, así como el valor de la naturaleza, es imperante para cualquier disciplina conocer los acontecimientos, patrones y geodiversidad del pasado en donde la materia prima son las rocas y fósiles”, declaró Víctor Manuel Bravo Cuevas, profesor investigador del Área Académica de Biología en la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH).
Mediante una entrevista, el docente Garza señaló que el objeto de estudio de las y los paleontólogos son los fósiles, es decir, cualquier evidencia de origen orgánico que tenga como mínimo 10 mil años de antigüedad. “Los fósiles son evidencia tangible de que la biota (conjunto de organismos vivos) y el ambiente han cambiado a través del tiempo”, comentó.
Asimismo, mencionó que existen distintas maneras de estudiar a los fósiles, sin embargo, la labor paleontológica primaria consiste en determinar qué es el elemento (plantas, dientes o conchas) y de quién es (de animales, plantas o microorganismos), por lo cual, la biología es una rama fundamental para emitir un juicio objetivo al respecto.
En relación al estado de Hidalgo, Bravo Cuevas destacó que se trata de una zona privilegiada, pues posee tanto diversidad como heterogeneidad de paisajes y hábitats. “Hidalgo tiene una riqueza paleontológica por cuestiones naturales e históricas, esto permite tener representados cuerpos de roca sedimentaria, que es en donde ocurren los fósiles. Con ellos podemos recuperar los momentos e hilar la historia de la evolución que ha tenido el territorio”, añadió.
En cuanto la diversidad de macro vertebrados que forman parte de la colección que se encuentra en la Autónoma de Hidalgo, destacó una de las pocas evidencias del león americano en el país, además de una tigresa, félidos, carnívoros pequeños, osos, camellos, llamas, venados, antílopes, caballos, mastodontes, mamuts y gonfoterios, entre otros.
Bravo Cuevas remarcó la importancia de generar conciencia en la sociedad en torno al valor científico, social, cultural y educativo que poseen los fósiles. Puntualizo que los mismos carecen de un valor económico al ser piezas irrepetibles y patrimonio de la nación: “No sería posible decir qué fue lo que pasó hace millones de años en el territorio hidalguense si no estudiáramos la evidencia fósil que tenemos, sin ello pierde el objeto y el sentido”, dijo.
Por ello, insistió en la importancia de notificar cualquier hallazgo con las autoridades y estancias pertinentes, mismas que tienen injerencia para realizar el rescate del ejemplar. Enfatizó que el material no se le quita a quien lo encuentra, sino que se le da la curación requerida y se regresa a su dueño, con la invitación de registrar su ejemplar para que se tenga conocimiento de que el elemento existe y está en posesión de algún individuo.
“El registro es algo necesario, pues dado sus valor como patrimonio de la nación, puedo conocer a nivel nacional y en el mundo que existe un ejemplar; si no hacemos esto, la pérdida de esta información repercute en lo social, cultural, científico y educativo”, declaró.
Extendió una invitación a la sociedad y a las instituciones educativas a acercarse a la UAEH, pues sus puertas están abiertas para brindar apoyo. “Mi deseo es que la gente tenga la confianza de acudir con nosotros para notificar cualquier hallazgo. Aquí vamos a apoyarlos para rescatar, dar mantenimiento, brindar un espacio idóneo de resguardo en caso de que lo deseen, o bien, orientarlos para que ellos sepan dar mantenimiento y cuidado al ejemplar con su registro correspondiente. A todas las instancias de educación, si desean conocer el trabajo que se hace o los ejemplares que tenemos, pueden acercarse a la institución para convivir con nosotros como paleontólogos y conocer”.
Para concluir, manifestó lo siguiente: “Los Fósiles son un bien inmueble irrepetible, único en el mundo, que debe conservarse porque es parte de nuestra historia, por lo tanto ese es su valor”.