Dirección de Comunicación Social, 04/Febrero/2023
Boletín Informativo UAEH No. 051
* La ciencia también es dinámica y fomenta nuevas formas de ver e interpretar las cosas para generar muchos más conocimientos
* La Tierra es dinámica y su corazón sigue funcionando
Pachuca de Soto, Hidalgo. – El registro de la ralentización del núcleo de la Tierra es un descubrimiento que va a permitir la generación de nuevo conocimiento científico, sin embargo, aún no hay suficientes pruebas que respalden los posibles efectos catastróficos que se han planteado hasta el momento, indicó José Cruz Escamilla Casas, docente de la Licenciatura en Ingeniería en Geología Ambiental de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH).
El también académico del Área Académica de Ciencias de la Tierra y Materiales del Instituto de Ciencias Básicas e Ingeniería (ICBI) manifestó que los resultados obtenidos por los investigadores Yi Yang y Xiaodong Song, del Instituto de Geofísica Teórica Aplicada de la Universidad de Pekín, en los que se da cuenta de que la velocidad del núcleo disminuyó al grado de igualar a la de la corteza, cumplen con todo el rigor científico y están debidamente fundamentados, pero que el camino de la ciencia aún es largo.
“Lo que tenemos es la primicia de un descubrimiento científico, pero todas las hipótesis que se formulen en este momento están sujetas a comprobación”, manifestó Escamilla Casas. Con esto se logró comprobar los cambios que se venían observando en ciertos fenómenos naturales o muestras fósiles y que hoy ya son un hecho, más no un conocimiento definitivo y acabado, pues no se sabe a ciencia cierta cuánto tiempo se necesitará para comprobar estos posibles efectos y repercusiones en los procesos naturales de la Tierra.
Escamilla Casas señaló que el estudio del movimiento del corazón de la Tierra, un núcleo sólido compuesto por níquel y hierro, comenzó con mayor certidumbre hace casi 70 años, que comparados con los que tiene el planeta son muy pocos y por ello aún se requiere de más estudios para medir el impacto de estos efectos, puesto que aún se desconoce cada cuánto ocurre este tipo de fenómeno.
Lo que se sabe hasta ahora sobre la conformación de la Tierra es por la implementación de medios indirectos, pero nadie conoce realmente las entrañas subterráneas porque no existen las condiciones para estudiarlas directamente. Aquí se considera la sismología, en la cual se estudian las ondas y cambios en las placas tectónicas, con estos cambios tan dinámicos en la corteza terrestre se han logrado hacer modelos sobre cuál es la estructura y características del planeta.
Con base en estos estudios se han generado más líneas del conocimiento, lo que ha permitido saber que hay cambios en el magnetismo de la Tierra, registrar los diferentes tipos de movimientos que tiene el planeta y cómo esto repercute en muchos procesos y ciclos naturales, como son la migración de animales, el clima, además de la mejora de las condiciones de vida en determinados lugares y momentos, por mencionar algunos, mismos que se pueden medir porque suceden en un periodo corto.
Aunque los estudios geológicos actuales no permiten dar por hecho nada sobre las repercusiones del cambio de la velocidad en el núcleo, sí advirtió que la Tierra es dinámica y que su corazón sigue funcionando pese a todo, aun con los grandes cambios que se han presentado como la extinción de los dinosaurios o la evolución de organismos unicelulares hasta seres más complejos, pero sobre todo, que este descubrimiento da muestra de que la ciencia también se afana y fomenta nuevas formas de ver e interpretar las cosas para generar más conocimientos.