Dirección de Comunicación Social, 19/Noviembre/2022
Boletín Informativo No. 656
*Esta ocasión tocó el turno a Jorge Armando Casanova para dirigir a la Orquesta Universitaria
Pachuca de Soto, Hidalgo. – La Orquesta Sinfónica de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (OSUAEH) ofreció el concierto “Tchaikovsky. El extraordinario”, bajo la batuta del director huésped Jorge Armando Casanova, en el Aula Magna “Alfonso Cravioto Mejorada”, localizado en el Centro de Extensión Universitaria (Ceuni).
En punto de las 19:00 horas, la agrupación universitaria interpretó uno de los temas más memorables del afamado compositor ruso Piotr Ilich Tchaikovsky: la Sinfonía Número 05 en Mi Menor Op. 64. Esta obra fue compuesta entre mayo y agosto de 1888, y estrenada en San Petersburgo el 06 de noviembre de ese año, bajo la batuta del propio compositor.
La pieza sinfónica conformada por los movimientos “Andante- Scherzo: Allegro con anima”, “Andante cantabile, con alcuna licenza”, “Valse: allegro moderato con patrioso” y “Andante maestoso- allegro vivace- molto meno mosso”, resonó en el Aula Magna “Alfonso Cravioto Mejorada” que en esta ocasión tuvo como invitado huésped a Jorge Armando Casanova.
En su momento, el escritor ruso Tchaikovsky escribió: “Introducción: Sumisión total al destino o, lo que es lo mismo, a la ineludible predestinación de la Providencia. Allegro: I. Murmullos, dudas, quejas, reproches a... II. ¿No es mejor lanzarse de cabeza a la fe? El programa es excelente, siempre que logre llevarlo a cabo."
Otra de las obras que se escucharon este viernes fue la “Obertura Ruslan y Ludmila”, de Mijaíl Glinka. El compositor ruso arregló esta que fue su segunda ópera, aparecida en 1842, la cual se basó en el poema narrativo de Pushkin. No obstante, su lenguaje complejo y lento, así como sus grandes dimensiones no complacieron ni a la corte ni al público.
Esta indiferencia a la que Glinka consideró su verdadera obra maestra, muy superior a Una vida para el zar, su primera ópera, lo amargó tanto que abandonó Rusia y pasó la mayor parte de sus últimos años de vida en el extranjero.
Respecto a las obras interpretadas este día, el director huésped, Jorge Casanova, puntualizó que en el caso de la “Obertura Ruslan y Ludmila” su virtuosismo engancha al público desde las primeras melodías, pero también implica un gran reto técnico para la sección de cuerdas; mientras que, en el caso de la Sinfonía de Tchaikovsky, tiene un aire romántico y alegre, muy característico del compositor ruso, en el cual se pudo disfrutar de un espléndido solo de corno.
A su vez destacó la disciplina y buena actitud con la que cuenta la máxima embajadora cultural de la UAEH, cuyos músicos le han permitido al director de la Orquesta Sinfónica de la Universidad Juárez del Estado de Durango (OSUJED), trabajar plenamente en la ejecución del concierto.
“La música es vibración y nosotros como seres humanos somos vibraciones, entonces no tengan miedo y dense la oportunidad de acercarse a la música clásica y no perder la oportunidad de permitirse sentir con ella”, manifestó.
Entre el público de esta noche se encontró el maestro Enrique Bátiz, quien el pasado jueves fue presentado como el nuevo director de la máxima embajadora cultural de la UAEH, de quien se podrá disfrutar su trabajo a partir de la Primera Temporada de Conciertos del 2023.
El próximo viernes 25 de noviembre, en punto de las 19:00 horas, la Orquesta Sinfónica de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo ofrecerá “Clásicos imprescindibles”, bajo la batuta del director huésped Antonio López.
Para mayores informes y adquisición de boletos, consultar la página de Facebook de la OSUAEH o marcar al número telefónico 7717172000, extensiones 2994 y 3031.