Dirección de Comunicación Social, 04/Junio/2021
Boletín Electrónico Informativo No. 328
*El especialista presentó su obra y motivó a los estudiantes a crear más propuestas
Pachuca de Soto, Hidalgo. – “Estamos haciendo un ejercicio de reapropiación del espacio público, de un espacio que por derecho nos corresponde, porque nosotros lo habitamos y por supuesto que tenemos el derecho de reinventarle, cuando comprendemos que el espacio público es nuestro, cambia la visión que tenemos”, declaró Edgar Olguín, fotógrafo profesional invitado al Conversafoto IA21, organizado por el Instituto de Artes (IA) de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH).
La obra de Olguín busca romper con la cotidianidad de las ciudades para resignificar el espacio público, primicia que ha plasmado con “Poner el cuerpo” o “Sacar la voz”, reflexiones donde abordan problemáticas sociales como los feminicidios, la desaparición forzada, Ayotzinapa y Atenco; mientras que en “Danzatrinas”, realiza un ejercicio estético sobre la representatividad del Día de muertos en México a través del color, la danza clásica y el movimiento.
De acuerdo con el artista, el acoso sufrido por bailarinas a manos de fotógrafos y el nulo trabajo que tenía publicado sobre danza, fueron los primeros obstáculos a los que se enfrentó para iniciar el proyecto Danzatrinas, sin embargo, gracias a “La hormiga”, bailarina amateur que conoció de manera fortuita en una reunión, logró sus primeras tomas en la estación del metro Polanco de la Ciudad de México.
El éxito de la serie fue inmediato, los medios de comunicación empezaron a buscarlo para conocer más sobre el proceso de creación, mientras que los danzantes comenzaron a colaborar con él. Fue su compromiso y respeto al trabajo de los bailarines lo que llevó a Edgar Olguín a estudiar a fondo sobre el lenguaje corporal, movimientos, así como posturas empleadas en la danza clásica, con el fin de retratar fielmente las técnicas y lograr una conexión emocional con la audiencia.
No obstante, para lograr sus series fotográficas fue necesario entablar el diálogo con las personas que habitan los espacios públicos retratados; esta comunicación es la que nutre a la obra. “Uno no llega con esta actitud arrogante de decir: yo soy el artista y vengo a hacerte el favor de retratar donde habitas. Es a través de la comunicación que puedes empatizar con estas personas”, resaltó Edgar Olguín.
El fotógrafo mexicano exhortó a los estudiantes de la máxima casa de estudios Hidalgo a crear propuestas estéticas desde una visión humilde, armados con herramientas que permitan hacer frente a los falsos elogios y evitar caer en la arrogancia.
Por último, adelantó que en noviembre de este año, y gracias a la gestión del Consulado Mexicano en China, tendrá una exposición de la serie fotográfica “Danzatrinas” en la ciudad de Shanghái. Gracias a esto, un total de 40 fotografías serán presentadas en gran formato en un espacio público, donde es difícil que la obra de un artista extranjero sea presentada.