Genera FINI reflexión en torno a multiculturalidad


Dirección de Comunicación Social, 03/Mayo/2019

Boletín Electrónico Informativo No. 232


Pachuca de Soto, Hidalgo.- Con una conferencia magistral sobre el uso político de la fotografía, la presentación editorial que invitó a mantener vigente la memoria histórica, además de la proyección de una película que desde la multiculturalidad reflexiona sobre el colonialismo, el racismo y las clases sociales, concluyó el primer día del IX Festival Internacional de la Imagen (FINI), que organiza la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH).

 

De esta forma, a través de esas actividades se abordó, desde diferentes perspectivas y con invitados internacionales, el populismo, tema central de esta edición del FINI que tiene como país invitado este año a Hungría.

 

Al hablar sobre el tema de la “fotografía y propaganda, el caso de Barack Obama”, Óscar Colorado Nates, profesor investigador de la Universidad Panamericana (UP), destacó que el uso político de la imagen logra un control poco evidente, pero efectivo.

 

Durante la conferencia magistral realizada en el Salón de Actos “Ing. Baltasar Muñoz Lumbier”, del Centro Cultural Universitario “La Garza”, el especialista planteó que el caso de Obama ha sido uno de los más sofisticados en cuanto a manejo de imagen, pues llegó al poder en gran medida por la propaganda en redes sociales, basada sobre todo en la fotografía.

 

“Todas las fotos tienen una agenda para que aprendamos a ver a Obama de una manera particular”, refirió el ponente, quien agregó que el expresidente de Estados Unidos se proyectó como un hombre comprometido, relajado, confiable, cercano a la gente de cualquier color de piel, todo ello, gracias al enfoque que le daba el fotógrafo Pete Souza.  

 

Tras afirmar que el fotógrafo capta determinados momentos, buenos o malos, los cuales son interpretados por los espectadores desde su subjetividad, y por ello “la imagen se puede trastocar  fácilmente”, Óscar Colorado cuestionó si los países se dirigen hacia un control político más sofisticado, menos evidente, pero más efectivo, a través de la fotografía.

 

De igual forma, en la Sala J. Pilar Licona, el escritor y crítico cinematográfico Rafael Aviña presentó el libro “¡No queremos olimpiadas, queremos revolución!, en donde explora y analiza diversos filmes y documentales como el de Rojo amanecer, que se han creado en torno al movimiento estudiantil y matanza de 1968. Muchas de estas películas, refirió, tuvieron que ser grabadas furtivamente e incluso han sido censuradas.

 

El autor de más de 30 libros charló con el público universitario sobre el pensamiento colectivo de las generaciones que vivieron el suceso de 1968, pues en ese entonces, muchos eran niños que no entendían nada de lo que estaba ocurriendo cuando veían luces de bengala en el cielo, primero verdes y luego rojas, que los militares adiestrados conocían como una señal de ataque.

 

Ante la matanza de estudiantes aquel 2 de octubre de 1968 en la Plaza de las Tres Culturas, Rafael Aviña planteó la necesidad de reconstruir los recuerdos, así como escuchar las historias de quienes vivieron en esa época, por lo que conminó a los jóvenes a tener presente esa fecha, para no olvidar la memoria histórica.

 

Por último se proyectó la película "Mentiras blancas", de la directora y productora Dana Rotberg, en la que se observa el fenómeno de la multiculturalidad, al presentar la historia de una curandera y partera de la tribu maorí, quien atiende a una mujer blanca para ayudarle a abortar, pues su embarazo es producto de una infidelidad.

 

Luego de la proyección del filme, la cineasta habló sobre este largometraje que ha recorrido exitosamente los principales festivales de cine del mundo. Explicó que esta película se centra en el grupo étnico maorí, de Nueva Zelanda, al presentar la historia de tres mujeres que se enfrentan a la colonización violenta y al despojo de su cultura e identidad.

 

La cinta aborda temas como las clases sociales, el racismo y el papel de la mujer en una sociedad patriarcal. De acuerdo con la cineasta, el guion se enfoca en la vida de las mujeres en ausencia del hombre, al tiempo que se propicia una reflexión en torno al hombre como exterminador de la vida, como ha sucedido en las colonizaciones alrededor del mundo, y de la mujer como protectora y dadora de vida.


Compartir en: