Reencuentro de Garzas del Universitario Hidalguense


Dirección de Comunicación Social, 12/Abril/2019

Boletín Electrónico Informativo No. 195


Pachuca de Soto, Hidalgo.- En el marco de los 150 años de vida institucional de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH), se realizó el reencuentro de las Garzas del Universitario Hidalguense de fútbol, en la cancha de “El Venado”.

 

El encuentro deportivo convocó al equipo que inició el proyecto y al que logró el ascenso a Segunda División Profesional, en un partido amistoso donde se evocaron las glorias de la década de 1990, cuando el conjunto universitario tomó fuerza y se consolidó.

 

La justa amistosa permitió la reunión de Maurilio García y Miguel Rico, timoneles entrañables de la escuadra Garza, quienes comandaron el partido desde la banca para dar indicaciones a sus jugadores, tal y como solían hacerlo hace 20 años.

 

Desde que el árbitro puso el balón en medio de la cancha y dio el pitazo para comenzar el juego, Fundadores y Acenso, como se denominaron los equipos, pelearon por el esférico luego de volver a sacar zapatos, medias, short y playera que conformaron el uniforme para demostrar que aún conservan la fuerza que los llevó a ser campeones en diversas ocasiones.

 

Al final, Fundadores se impusieron a los de Ascenso al lograr anotar tres goles, mientras que estos últimos sólo alcanzaron a meter la esférica en tres ocasiones en este encuentro organizado por el administrador de la Villa Deportiva “Mario Vázquez Raña”, Ananías Hernández Baños.

 

El profesor Maurilio García expresó en entrevista su emoción por el reencuentro con los jugadores, pues fue el director técnico en el inicio del proyecto. “Esto no tiene precio, el poder convivir después de más de 20 años con los muchachos. Este es el primero y ojalá no sea el último”, manifestó al término del juego.

 

Indicó que después de cerrar su ciclo con las Garzas del Universitario Hidalguense no había vuelto a Pachuca, por eso se sintió muy contento cuando lo llamaron para este partido amistoso y convivencia, por lo que se trasladó desde Guadalajara, Jalisco.

 

Recordó que algunos miembros del equipo que dirigió llegaron desde los 16 años a las canchas universitarias, por lo que recalcó que haber formado a esas generaciones y verlos cómo han crecido, no tiene precio, por ello destacó la importancia de emparejar el deporte con la educación.

 

Para cerrar este reencuentro, los jugadores se tomaron la foto del recuerdo, para después comenzar una convivencia donde trajeron a la memoria anécdotas de aquellos años de glorias futboleras.


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