Dirección de Comunicación Social, 11/Abril/2019
Boletín Electrónico Informativo No. 193
*A los alumnos de primaria “Fraternidad Hidalguense”, como parte del programa “Domingos en la Ciencia”
*Científicos encuentran 58 especies que nadie sabía que vivían en el estado, entre osos, pumas y jaguares
Pachuca de Soto, Hidalgo. – Como parte del programa “Domingos en la Ciencia”, que aplica la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH) en escuelas de educación básica, el investigador Alberto Enrique Rojas Martínez, invitó a alumnos de la primaria “Fraternidad Hidalguense” a cuidar los mamíferos, porque cumplen un papel importante en el ecosistema.
Durante la conferencia “Los mamíferos del estado de Hidalgo, ¿Mejoran el ambiente en que vivimos?”, que impartió ante pequeños de cuarto grado de primaria, profesores y padres de familia, el científico del Centro de Investigaciones Biológicas de la máxima casa de estudios de la entidad sostuvo que estos animales son útiles, pues en ninguna circunstancia generan daños y deben ser conservados.
Precisó que las especies pequeñas son más significativas para el ecosistema que las grandes, sin embargo, como casi no se ven, son menos apreciadas por el ser humano. Por ejemplo, los ratones pueden comer hasta el 80 por ciento de las semillas cada año, lo que es bueno porque permite a más plantas habitar en los mismos lugares. “De lo contrario, las plantas competirían entre ellas y reducirían su diversidad biológica”, apuntó.
El catedrático de la UAEH indicó, asimismo, que los murciélagos y los ratones representan el 75 por ciento de las especies de mamíferos que viven en el mundo y en Hidalgo, además de que sólo el 25 por ciento de ellos pesan más de 100 gramos, cuando el resto se sitúa en niveles que apenas y superan los 10 gramos.
Rojas Martínez señaló que Hidalgo es un estado mega-diverso en mamíferos, y del lugar 17 que ocupaba en 1995, se ubicó en el sexto a nivel nacional gracias a los hallazgos de los investigadores de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo. “Hemos descubierto que en la entidad existen 58 especies que nadie sabía que vivían aquí, incluyendo osos, jaguares y pumas”, reveló el investigador.
Durante su conferencia, agregó que en México hay estados que por su geografía permiten la presencia de diversos mamíferos. En el caso de Hidalgo, sus altas montañas, valles, bosques y clima semiárido admite la existencia de ejemplares de zorros, murciélagos, tlacuaches, osos o los conocidos como “cabeza de viejo”, entre otras especies.
En su plática, comentó que se tiene una mala percepción de estos mamíferos, pero es necesario hacer conciencia y cambiar esta mentalidad, pues los vegetales necesitan de los animales y viceversa. “Es importante hacer notar que los bosques y selvas están saludables, gracias a los animales que viven en ellos”, enfatizó.
En el caso de los murciélagos, el investigador Alberto Rojas explicó que son buenos polinizadores, ya que comen la fruta que producen los árboles y tiran las semillas donde nacen nuevas plantas. “Es nuestra obligación conservarlos, ustedes pueden aconsejar a sus familiares y vecinos que nos los maten, porque es por ellos que disfrutamos los hermosos paisajes naturales”, manifestó a los pequeños.
Acerca de los osos, aseveró que hace 10 años se encontró un ejemplar en Pisaflores, pero actualmente se ha documentado a través de fotografías su existencia en el Parque Nacional Los Mármoles, “y eso nos indica que son animales muy comunes en la sierra hidalguense”.
Sobre los pumas vistos en la zona de Actopan, declaró que “están aguardando una conducta extraña, pues se están acostumbrando a vivir cerca de las poblaciones humanas, donde matan burros y caballos, animales que normalmente no consumen”.
La Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo genera al menos el 80 por ciento de las investigaciones en el estado, por lo que es así como a través del estudio de mamíferos realizado durante 16 años el científico Alberto Rojas, se muestra el compromiso de esta casa de estudios en la búsqueda de respuestas y soluciones a las necesidades de la sociedad.