Dirección de Comunicación Social, 26/Octubre/2018
Boletín Electrónico Informativo No. 638
Pachuca, Hidalgo.- Promover estilos de vida saludable en la infancia para evitar enfermedades posteriores, fue el objetivo de la conferencia titulada "Epigenética y estrés", impartida a niños de quinto y sexto grados de la Escuela Primaria Francisco I Madero de Pachuca, como parte del Programa “Domingos en la Ciencia” que realiza la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH), en conjunto con la Academia Mexicana de Ciencias.
El investigador de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Zaragoza, de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Víctor Manuel Mendoza Núñez, destacó la importancia de que los pequeños estén conscientes desde temprana edad sobre las consecuencias de tener estilos de vida no saludables. Por ello, en su conferencia señaló que anteriormente se pensaba que la carga genética determinaba en gran medida las enfermedades que padecía una persona, e incluso se suponía que padecimientos como la diabetes o el cáncer se heredaban genéticamente.
Sin embargo, después se demostró que el ambiente y el estilo de vida modifican el desarrollo de un individuo, de tal manera que pese a tener predisposición hacia alguna enfermedad por la herencia genética, si se lleva un estilo de vida saludable y en un ambiente adecuado, el riesgo de presentar dicho padecimiento disminuye. Por el contrario, si una persona no tiene ninguna carga genética para padecer alguna enfermedad, pero tiene estilos de vida inadecuados, esto influye para que la persona presente enfermedades crónico-degenerativas.
El investigador explicó a los alumnos que la epigenética es el análisis causal del desarrollo de los seres humanos, de forma que el desarrollo de una persona depende, más allá de su herencia genética, de factores como su alimentación, actividades y ambiente que lo rodea, que en conjunto constituyen modificaciones químicas que se añaden al ADN heredado por los abuelos.
Justamente uno de los factores que más influye en el desarrollo sano o no sano de las personas, es el estrés, el cual contribuye a generar enfermedades que posiblemente no estaban heredadas genéticamente, pero que se ven favorecidas por hábitos y ritmos de vida no adecuados. “El estrés incide en la fabricación de proteínas que a su vez determinan que una persona se enferme o no”, refirió el doctor en Ciencias Biológicas.
Expuso que el estrés es la respuesta físico-biológica del cuerpo ante las situaciones de amenaza, así, cuando se percibe ese peligro se eleva el ritmo cardiaco, se acelera la respiración e incrementa la disponibilidad de azúcar en la sangre, mencionó el especialista, al comentar que hay diferentes niveles de estrés y el nocivo o distrés se caracteriza por una respuesta excesiva ante los peligros de forma que favorece la presencia de enfermedades.
Por ello, resaltó la importancia de tener estilos de vida saludable, como lo es llevar una alimentación adecuada, hacer ejercicio físico moderado, dormir ocho horas, tener una autoestima sana, entre otros. En ese sentido, concluyó que existen grandes desafíos para promover buenos hábitos entre la población, como la generación de políticas públicas que favorezcan entornos adecuados, programas de convivencia y participación social que favorezcan el bienestar, estrategias de estilos de vida saludable en todas las etapas del ciclo de existencia, además de armonizar las tácticas de la vida saludable con el uso responsable de la tecnología.