Dirección de Comunicación Social, 02/Julio/2016
Boletín Electrónico Informativo No. 387
*Karina Nieto, alumna de la licenciatura en Cirujano Dentista desarrolló el caso Mordida abierta anterior asociada al hábito de succión digital
Pachuca de Soto, Hidalgo. Karla Gabriela Nieto Arana, quien cursa el décimo semestre de la licenciatura en Cirujano Dentista en el Instituto de Ciencias de la Salud (ICSa) de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH), obtuvo segundo lugar en la categoría Caso Clínico, durante el II Encuentro Estudiantil de Investigación realizado en el marco de la Feria Internacional de la Salud (FIS) 2016.
Este encuentro promueve la apertura de un espacio para la reflexión y el diálogo científico entre los estudiantes de licenciatura y posgrado del ICSa, presenta investigaciones en desarrollo y concluidas; así como casos clínicos que permiten a los alumnos comunicar los resultados de investigación y compartir experiencias clínicas con otros.
Karla comentó que este reconocimiento no hubiera sido posible sin el apoyo y guía de la académica Martha Mendoza Rodríguez, quien la orientó durante el proceso para llevar a cabo el tratamiento adecuado para el paciente del caso clínico y la animó a participar en el certamen.
Explicó que el caso, denominado Mordida abierta anterior asociada al hábito de succión digital, fue el de un niño de ocho años que presentaba una alteración ósea, muscular y dental, la cual derivó en una malformación dentaria ocasionada por introducir su dedo pulgar a la boca, lo que repercutió en que los dientes posteriores hicieran contacto mientras que los de enfrente no.
La universitaria señaló que el niño, acompañado por su madre, pidió atención en la Clínica Odontológica, ubicada al interior del ICSa, solicitaron consulta y al realizar el diagnóstico se optó por colocarle un aparato interceptivo durante un periodo de tres meses y medio, así como ayudarle a eliminar el hábito. “Cuando llegó, el niño tenía una mordida abierta de siete milímetros y posteriormente se cerró a tres y se demostró que a través de un aparato se puede redirigir la malformación”.
Añadió que el paciente no solo tenía alteraciones dentales sino que tampoco podía cerrar sus labios de forma normal y por eso, aunado al tratamiento de ortodoncia, se le indicaron ejercicios musculares para recuperar tonicidad del labio.
Sobre el avance del caso, indicó que gracias a la cooperación del paciente y de su familia, el pequeño dejó el hábito totalmente además de que usó el aparato, construido por ella, todos los días, observando en cada sesión de seguimiento un avance favorable. “Creo que la más grande satisfacción que uno puede tener es observar la evolución y cambio de actitud de sus pacientes”, finalizó.
-Dafna Baltierra-