Dirección de Comunicación Social, 25/Abril/2016
Boletín Electrónico Informativo No. 249
Pachuca de Soto, Hidalgo.- El analista de políticas educativas, públicas y educación comparada, Eduardo Andere, impartió la conferencia “¿Cuál es la clave para una educación de clase mundial?”, en el marco de las actividades del Festival Internacional de la Imagen (FINI), en el que destacó que un niño educado de forma intrínseca sufrirá menos que alguien educado de manera extrínseca.
Indicó que el modelo educativo de México está lleno de formas extrínsecas, en la que se premia al alumno luego de obtener el triunfo, algo no muy bueno porque después el niño pide un premio mayor y si no se le da no habrá motivación, por el contrario es controlador: “en la primaria se le promete un bicicleta, en la secundaria una moto, y si sobrevive, en la Preparatoria le dan un automóvil”, manifestó.
Es probable que al mismo tiempo se trabaje con el modo intrínseco en el que se le reconoce el esfuerzo pero no hay premio, por lo tanto, el pequeño pondrá toda su energía para mejorar o seguir trabajando. Señaló que la forma de educación para los niños de cero a ocho años de edad debe ser intrínseca.
Para una correcta forma de educar a los pequeños en este modo es importante implementar estrategias que tengan que ver con su propio desarrollo, su propio autocontrol, su autorregulación, que sepan que las cosas las hacen para su desarrollo personal, que las hacen porque les gusta hacerlas, no porque tienen qué hacerlas, en un ambiente de aprendizaje que estimule motivadores intrínsecos. “Que ellos sepan que lo premiado es el esfuerzo y no el resultado a base de estímulos para que no sean controladores”, refirió.
En su ponencia manifestó que la manera extrínseca está basada en la vida de negocios de los adultos, donde los niños están impulsados por la lógica de la competencia en la que serán empujados a ganar todo el tiempo. Sin embargo, en este tipo de aprendizaje es importante recordar que mientras uno gana, el otro pierde.
Frente a un público que nutrió el Salón de Actos “Ing. Baltasar Muñoz Lumbier”, del Centro Cultural Universitario “La Garza” de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH), el especialista integró a su cátedra una dinámica, en la que pidió a los presentes sacar una hoja para dibujar el cerebro humano y luego la mente.
En lugar de realizar su conferencia desde el podio, bajó a los pasillos y caminó entre los alumnos para explicar que la imagen es lo que representa algo y la educación, aquello que permanece cuando lo aprendido se ha olvidado. Enfatizó que la educación sirve para detectar basura y permite ver si tiene o no valor intrínseco.
Resaltó la forma en que la educación de la imagen está plagada de información y se usa para promover conceptos, una vez dominada la imagen, esta se usa para construir valores o destruir. “La imagen puede ser usada para transmitir y conocer la verdad, lo que también le da un uso positivo”, detalló.
Comentó que se llega al conocimiento a través del ensayo y el error, en el cuál debe haber una retroalimentación. En la medida que el cerebro madura se inhibe, luego de ver, hacer y escuchar cosas repetidamente. En un plazo de 20 años, el cerebro se veda y controla la mente, por ello Andere aconsejó dar una educación donde el cerebro sea inhibido socialmente y desinhibido creativamente.
Al finalizar el evento, Alfonso Galindo Rodríguez, coordinador de la División de Docencia, en representación del rector y presidente del Consorcio de Universidades Mexicanas (CUMex), Humberto Veras Godoy, entregó un reconocimiento a Eduardo Andere por la ponencia impartida en el marco del Festival Internacional de la Imagen.
-Eva Becerril- Fotografía: Carlos Sánchez