UAEH propone modelo para la pequeñas y medianas empresas


Dirección de Comunicación Social, 17/Febrero/2014

Boletín Electrónico Informativo No. 099


*El modelo busca ayudar a las empresas a que tengan una debida planeación

 Pachuca de Soto, Hidalgo.- La pequeña y mediana empresa (PyME) ha ganado terreno con el paso del tiempo gracias a la urbanización que el estado experimenta, sin embargo, la realidad converge entre las empresas que logran salir de esta categoría y las que fracasan en el intento.

La tecnología crece a pasos agigantados y muchas empresas se ven afectadas al no poder modernizarse con las exigencias de los clientes y sus necesidades, ¿qué hacer cuando no es suficiente lo que se ofrece a las personas y la empresa empieza a tener pérdidas?

El modelo sistémico para la innovación producto-tecnología realizado por Jaime Garnica González, profesor investigador de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH) explica qué se debe hacer para que cuando se haga innovación en un producto, éste no sea rebasado en un corto plazo o pierda su valor como producto, sino que se tenga una planeación estratégica para que la tecnología sea incorporada de manera eficaz a dicho producto.

Este modelo busca ayudar a las empresas a que tengan una debida planeación tanto de lo que es el mercado, la cuestión tecnológica y la misma evolución de ir adaptando el producto a esas nuevas tecnologías para que siga dentro de la aceptación o gusto del cliente.

A través de técnicas como el análisis FODA (Fortalezas, Oportunidades, Debilidades y Amenazas), estudios de mercado y los diferentes modelos que se revisaron previamente, se obtiene un sistema  normativo (qué se quiere lograr), dicho sistema se enlaza con el sistema estratégico de la empresa (cómo se va a lograr) con el fin de determinar metas y realidades que desemboquen en el mejoramiento de la empresa.

“Para poder hacer este estudio, se revisaron al menos veinte modelos de innovación que existen, estamos hablando desde 1935 cuando se empieza a definir lo que es innovación, la cual fue asociada a los impactos que la economía experimentaba en la nación, pero para que esto sea posible el impacto debe surgir desde la entidad más pequeña con la unidad de negocio llamada empresa”, señaló el investigador universitario.

Se habla en la actualidad de competitividad, la capacidad que tiene una empresa de generar la mayor satisfacción de los consumidores, la cual tiene que ver con la generación de valor a la organización, a los productos y servicios que sean vendibles, los cuales requieren de un innovación constante.

Según el modelo los efectos de no tener una empresa con ventaja competitiva pueden ser desastrosos, datos de la Comisión Económica Para América Latina y el Caribe (CEPAL) estiman que tan solo en México el 75% de las PyMEs desaparece en los tres primeros años, de cada 100 empresas sólo llegan a sobrevivir 10 que pasan por el proceso de ser una fuente confiable de economía y de generación de empleos.

-Sandra Lizette Franco Hernández- Fotografía: Eusebio Hernández Cadena.


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