Producción Científica Profesorado

Crónicas del Antropoceno: el Arrecife Osborne.



Vázquez Rodríguez, Gabriela Alejandra

2017

Vázquez Rodríguez G.A. (2017) Crónicas del Antropoceno: el Arrecife Osborne. Elementos Vol. 107, pp. 3-8.


Abstract


Un arrecife (del vocablo hispano-árabe arrasíf, que significa ?empedrado?) es una estructura, usualmente coralina o rocosa, que se encuentra cerca de la superficie del mar. Por extensión, los arrecifes también se refieren a las comunidades de peces, algas e invertebrados que los habitan. Representan uno de los ecosistemas más valiosos de la Tierra, ya que su enorme biodiversidad, en el caso de los arrecifes coralinos, es comparable a la de los bosques tropicales. Además, prestan servicios ambientales nada despreciables, como proveer alimento a millones de personas, disipar la energía de tormentas tropicales y tsunamis, fijar dióxido de carbono atmosférico y ofrecer sitios de belleza incomparable. En suma, se estima que los servicios de los arrecifes mundiales valen unos 375 mil millones de dólares al año. Nada mal, si consideramos que no representan siquiera el 0.01 % de la superficie terrestre (NOAA, 2008). Los arrecifes artificiales, por su parte, son estructuras sumergidas o construidas para conseguir uno o más de estos servicios, por lo general la protección de costas y playas de la erosión. Los primeros quizás fueron construidos por la civilización persa en el Río Tigris, hace dos mil años, para protegerse de incursiones piratas. Dado que proporcionan un hábitat estable para la vida marina, también permiten incentivar la pesca recreativa y cultivar especies de interés comercial. Algunos arrecifes artificiales de Japón, por ejemplo, se han dedicado al cultivo de ostras productoras de perlas. Otros se construyeron con fines puramente turísticos, ya sea para generar olas propicias para el surfeo (como los arrecifes de Cables y Bagarra, en Australia) o para atraer a buzos y entusiastas del snorkel. Algunos de estos últimos fueron diseñados y construidos por artistas, como los que se encuentran en el Museo de Arte Subacuático, en el Parque Nacional Costa Occidental de Isla Mujeres, Punta Cancún y Punta Nizuc, en el Caribe mexicano. Así, aunque se construyen desde hace varios siglos, los arrecifes artificiales son muestra de que la alteración del ambiente que caracteriza al Antropoceno (?la era del hombre?) se extiende desde las profundidades submarinas hasta el espacio exterior.



Producto de Investigación




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