No.
6/ Año 1 / Mayo 31, 2006. |
"Fui conocido cómo el hombre que le devolcio la vida al reloj universitario"
- Juan Gerardo Pérez Neria.
La cita era en aquel cuarto que no hace muchos años fungía como salón de clases de la entonces joven Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH). el siempre ha estado hay, el
ha sido testido de aquel tiempo universitario, ese que gira en torno a tods una vida. El Guardia del tiempo, acuñado asi por amigos de la época, Carlos Peña González testigo de la vida universitaria desde el campanario del edificio central.
¿Cuáles son sus actividades dentro de la universidad, y
desde cuándo las lleva al cabo?
Yo comencé a laborar en esta casa de estudios en el año
de 1969, en ese año me entregaron la maquinaria del reloj
del edificio central en condiciones inservibles, estaba
totalmente estropeada; a raíz de que la reparé le comenté
al Rector en aquel entonces al licenciado Jesús Ángeles
Contreras que debía contratar a una persona que
le diera mantenimiento constante; y sin saberlo sería yo
esa persona a quien iban a contratar para hacer dicha
función. En su momento y de broma me llamaban cómo
el hombre que le devolví la vida al reloj universitario.
¿Cómo es un día normal en la vida de don Carlos dentro
de la institución?
Un día normal lo resumo en estar al pendiente del mantenimiento
al reloj, de que no existe alguna avería y por lo
regular subimos a darle mantenimiento cada tercer día,
pero si existe una falla grave hay que subir hasta diez
veces diarias, de lo cual no me quejo porque es lo que me
gusta hacer y además me ejercita -risas-.
¿Cómo era la Universidad Autónoma de Hidalgo para la
década de los sesentas misma en que ingreso a trabajar,
y desde su punto de vista cómo ha visto cambiar a esta
casa de estudios?
Este edificio en su conjunto formaba parte del Instituto
Científico Literario de Artes y Oficios, cada una de estas
oficinas eran los salones de clase, era una universidad
muy pequeña en cuanto a tamaño y la cantidad de estudiantes,
más no en nivel académico, sin embargo esta
institución ha ido creciendo a niveles enormes tanto en
infraestructura como en demanda estudiantil; creo que
las administraciones universitarias han hecho un gran
esfuerzo para darle una magnitud importante a nuestra
universidad.
¿Cómo se describe a sí mismo don Carlos dentro de su
papel de trabajador?
Soy una persona normal con defectos y virtudes como
todo ser humano, algunas de esas virtudes que aprendí
en casa y las reafirme en la escuela son valores como la
honestidad, el respeto y la puntualidad. Además creo ser
una persona que me adapto a lo bueno y a lo malo para
resolver los problemas.
¿Qué es lo que más le apasiona de su trabajo?
No soy una persona que se encasille en una sola actividad,
como te dije me adapto a todo, a mi no me gusta sólo
la mecánica de los relojes sino la mecánica en general,
de carros, la fontanería, la electricidad etc. En fin en esta
vida hay que saber hacerla de todo.
Si tuviera la oportunidad de cambiar algo de esta casa
de estudios ¿Qué cambiaría?
Lo único que cambiaría sería al personal que fuera
impuntual, cierto que la impuntualidad es una característica
del mexicano pero en cuestiones del trabajo hay
que dejar los estereotipos a un lado; siendo puntuales
estamos del otro lado.
¿Cuál ha sido la experiencia más grande de trabajar en
la universidad?
No ha sido sólo una sino muchas, a veces en el transcurso
de la vida creé uno saberlo todo pero lo más seguro
es que nos equivoquemos; estoy muy contento
aún, el trabajar con mis compañeros y compartir esas
experiencias, eso no lo cambio por nada, además de
caminar por los pasillos en los que he trabajado por
tantos años y darme cuenta del aprecio que la gente
siente por uno, eso muy grato.
¿Algo que desee agregar? este es su espacio
Pues solamente agregar que ojalá el Dr. Luis Gil Borja
amigo mío y de mi familia, siga estando al frente de
nuestra universidad, mientras yo me encuentre también.
Además de exhortar a los jóvenes universitarios
a que sigan por el camino de la preparación académica
para llegar a ser buenos ciudadanos.