Concurso de cartel
Azul Morris

Cuando recibí la invitación para formar parte del jurado de la décima edición del Festival Internacional de la Imagen, además de sentirme muy honrada, me pareció una gran oportunidad para acercarme a tan variados creadores de la imagen y poder reflexionar en torno a su trabajo; poco después también me sorprendió mucho enterarme del número de países participantes: ¡setenta y siete! Lo que me esperaba se me dibujó como una promesa maravillosa.

Y así fue. Bajo el tema “Agua” —aparentemente común o trillado— se desplegaban ante mí trazos, colores, técnicas, pero, sobre todo, pensamientos y emociones culturales de cada país; en esa diversidad pude ver cómo se expresaba un mismo tema, con similitudes y diferencias, a partir de distintos recursos formales para lograr una síntesis creada con la imagen y la tipografía. Me impactaron muchos trabajos, pero baste de ejemplo aquel cartel que parece alzar la voz “¡H2O!” y evocar El grito de Edvard Munch; o el otro que, con excelente composición fotográfica, muestra una escena caótica, de destrucción, que está a punto de salvarse por una simple gota de agua. Fue muy interesante y conmovedor revisar todas esas propuestas como si fueran diferentes caminos buscando alternativas.

Finalmente, haber participado como jurado al lado de Alejandro Magallanes y Bata Knežević fue una experiencia muy grata por reencontrarme con Alejandro y conocer a Bata, y sumamente enriquecedora por el intercambio de apreciaciones y análisis que pudimos construir con facilidad y que, sin duda, no hubiese tenido esa fluidez sin la valiosa coordinación de Frida Castañeda Bulos, subdirectora del FINI.