“La violencia contra las mujeres no es exclusiva de ningún sistema político o económico; se da en todas las sociedades del mundo y sin distinción de posición económica, raza o cultura. Las estructuras de poder de la sociedad que la perpetúan se caracterizan por su profundo arraigo y su intransigencia. En todo el mundo, la violencia o las amenazas de violencia impiden a las mujeres ejercitar sus derechos humanos y disfrutar de ellos.”  Amnistía Internacional.


 
 

Las representaciones de la violencia ocupan un lugar destacado en la historia del arte contemporáneo, no sólo en aquellas obras que, con los más diversos estilos, técnicas y soportes materiales la abordan directamente, también porque lo impregna todo y se convierte en punto de referencia fundamental a la hora de comprenderlo y valorarlo, para captar su significado.

Lo que busca toda violencia es la anulación del otro. Y no necesariamente en términos físicos, sino también la anulación identitaria. Si partiéramos de la base ideal de que una relación entre dos personas es simétrica, la violencia siempre va encaminada a modificar ese equilibrio, a que a través de la fuerza anula el porcentaje de influencia de la otra persona. En el caso de violencia hacia la mujer se da otro componente importante, que es el de la posesión y que va encaminado a dominar e imponer totalitariamente una serie de parámetros. Porque, tradicionalmente, el hombre ha sido educado en base a la idea de que la mujer, de alguna manera, le pertenece, es inferior o es algo que puede manejar. Los agresores usan ese presupuesto ideológico para justificar la violencia que ejercen.

La violencia no solo se ejerce, también se vive cotidianamente, en los espacios sociales, laborales, y a través de los medios de comunicación. Gabriela Ulloa recurre a sus imágenes fotográficas, impregnadas de conceptos y simbolismos, para reivindicar su derecho a la identidad y a la libertad, y a su vez, descargar su dolor existencial,  entre significados y significantes, consecuencia de los efectos secundarios subproductos de la violencia y el machismo. Enfrenta visual y dicotómicamente a Eros y Tanatos para reafirmar el derecho de toda mujer a usar su cuerpo y vestimenta ‘libremente’, sin ser prejuiciada, discriminada, estigmatizada, violentada y hasta asesinada.

La dictomìa, también la conceptualiza en  la fusión de las técnicas con que ha recreado estas imágenes: La manipulación digital del siglo XXI y la impresión en papel salado, del XIX. La violencia y machismo que traspasan la historia, desde las primeras luchas feministas hasta nuestros días repletos de avances tecnológicos, quedan reflejados en esta conjunción visual de tiempo y espacio. Estas imágenes del proyecto ‘Hìbridos’, son el resultado de la beca de Artes Visuales: Creadores con trayectoria, del Fondo Estatal para la Cultura y las Artes en Hidalgo, emisión 2011.

 

CURRICULUM VITAE

MA. GUADALUPE GABRIELA ULLOA SOTELO.

LIC. EN ARTES VISUALES
UNIV. AUTONOMA DEL ESTADO DE HIDALGO,  UAEH.

ÚLTIMO GRADO  DE ESTUDIOS

Licenciatura en Artes Visuales
Domicilio: Ex. Hacienda de San Cayetano s/n.
Mineral del Monte Hgo.

Becaria del FOECAH en creadores  con trayectoria 2011.

 

LUGAR: Galería de Arte Contemporáneo, Centro Cultural Universitario Dr. Víctor Manuel Ballesteros García, Morelos 704, Col Centro.

HORARIO: Lunes a viernes de 09:00 a 18:00 hrs.

 

 

 


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