Sin duda, la crisis sanitaria actual y la posterior crisis económica que atravesaremos son las dos cuestiones más importantes de esta pandemia. Sin embargo, el impacto psicológico en las personas que día a día han tenido que quedarse confinadas en sus casas es muy elevado y diferente en cada uno.
Hay ciertos sentimientos y reacciones por los que todos podemos pasar: miedo, incertidumbre, indefensión, tristeza, aburrimiento, desidia, nerviosismo o frustración. Todas ellas, reacciones normales y esperadas en estos momentos. En mayor o menor medida, durante esta cuarentena estamos sintiendo estas emociones. Está bien sentirlas y no debemos luchar contra ellas.
Las personas infectadas por el coronavirus, con cuadros leves, que deben permanecer aisladas del resto de convivientes, experimentan, además del malestar físico, otras emociones adicionales.
La soledad se convierte en un síntoma más de la infección, que se puede combatir con las video-llamadas a amigos y familiares. Sentimientos de autorreproche o vergüenza por haberse contagiado, a la vez que culpa o miedo por la posibilidad de haber contagiado a personas de su entorno.
Infórmate sobre cómo mantenerte seguro: obtén información de fuentes fiables y sigue las instrucciones. Estamos siendo bombardeados constantemente con información a través del telediario y las redes sociales. Este continuo flujo de información contiene desde los bulos y rumores más absurdos hasta la información más cruda y veraz. Todo ello contribuye a la sensación de miedo constante. Es importante seleccionar información fiable tenemos estrategias de afrontamiento que permiten sobrevivir antes situaciones complicadas o de estrés. Identifica en ti todas aquellas habilidades que te hacen fuerte ante la adversidad. En ocasiones anteriores has podido vivir situaciones complicadas que te han puesto al límite y, sin embargo, has sido capaz de afrontarlas y salir adelante.
Mantén hábitos de vida sanos: establece un adecuado ritmo de vida, con dieta saludable, higiene, ejercicio y buenos hábitos de sueño. Evita el alcohol, un exceso de bebidas con cafeína y el consumo de drogas. Establece una rutina en la medida de lo posible. Organiza las actividades que tengas en mente realizar a lo largo del día y establece un horario para realizarlas, desde el trabajo en casa hasta cocinar, leer, hacer deporte en la medida de lo posible y ponerte en contacto con las personas que te apetece.
Construye tu propia resiliencia: la resiliencia es el proceso de adaptación y afrontamiento ante la adversidad. Echa un vistazo al pasado e identifica aquellos momentos duros en los que has sido capaz de establecer estrategias de afrontamiento.
Ten un plan: establece una organización en cuanto a la compra, las actividades del día a día, organiza el trabajo, así como las actividades con tu pareja o tus hijos. Especialmente, las salidas tienen que estar muy organizadas para limitar al máximo el tiempo que pasas en la calle y puedas estar en contacto con otras personas. Prepara una lista de la compra y un itinerario si necesitas ir a más de un establecimiento. Evita los horarios de mayor confluencia de gente.
Comunícate con tus hijos: informales de la situación adaptando la información a la edad y circunstancias de cada niño. Los niños tienen una gran capacidad de adaptación, y están en una etapa de desarrollo donde el aprendizaje vicario (es decir, el que se aprende observando a los adultos y otros niños) es muy potente. Valora que tú eres su ejemplo de afrontamiento ante las adversidades y de gestión de las emociones. Es importante que los niños sigan realizando tareas escolares y actividad física. También es muy importante que te comuniques con las personas mayores de tu familia que se hayan podido quedar aisladas. Asegúrate de que hablas con ellas a diario y que tienen todas sus necesidades cubiertas. Ofrécete a ayudarlos todos los días, especialmente si sabes que les cuesta aceptar ayuda.
Mantente conectado: continúa con el contacto social con tu familia y amigos, aunque con ciertos límites en el consumo de internet y redes sociales. Afortunadamente, disponemos de miles de opciones para continuar hablando con la gente que ahora mismo no podemos ver, utilízalas de un modo saludable, poniendo también horarios y límites.
Esperamos que, siguiendo estos consejos, el confinamiento durante la crisis del coronavirus se pueda hacer un poco más llevadero: sin miedo a sentir, sin miedo a vivir.
Te adjuntamos varios links de videos de ejercicios que puedes realizar para manejar el estrés.
https://www.youtube.com/watch?v=fSqMGY3r45k
https://www.youtube.com/watch?v=1W7dOdSKVkA
https://www.youtube.com/watch?v=-3cLqYsIfzY
https://www.youtube.com/watch?v=RPkjCrCtCkY&list=WL&index=3
https://www.youtube.com/watch?v=-AOrPYzNYcY
https://www.youtube.com/watch?v=0is459zM92U&t=22s