Dirección de Fomento a la Lectura

 

“El abuelo Martín” es quizá el ejemplo más contundente: el final sorpresivo advierte no solo de un acto criminal sino de la distorsión de la memoria, instalada en el error y la misoginia colectiva. Por otro lado, “Con las manos atadas”, que también contiene una descripción minuciosa de las posiciones de los cuerpos, parte de un acto criminal para que el protagonista tenga un escape mental y una oportunidad imaginaria para crear un encuentro sexual.

Otros cuentos de Quién no mantienen una atmósfera situada en el límite de las decisiones de los personajes; algunos explotan, otros están a punto de hacerlo –aunque eso quede postergado en el tiempo de la narración y las acciones– y otros siguen el juego en el que indirectamente han caído: el final sorpresivo, clave en la estética de un tipo de cuento, tal como lo sugiere Julio Cortázar –con la analogía del box, el escritor argentino argumenta que la novela gana por puntos y el cuento gana por knock out–,no siempre consiste en tomar la decisión más radical, violenta o inesperada: a veces lo sorpresivo reside en no ejecutar una acción precipitada y en mantener las apariencias que salvan al protagonista, como ocurre en “Lo de papá” y “Dos valijas”; en este último,

el tema del doble no se aborda desde el género fantástico, como es habitual, sino desde lo cotidiano, cuya violencia también se representa desde lo familiar, tal como se narra en otro cuento, “Lo mejor de vos”, a propósito de la sobre protección de los padres y los modos hiperbólicos en que la protagonista corta el cordón umbilical.

Catedrales es una novela reciente de Piñeiro que explora el tema de los feminicidios; es probable que uno de los cuentos de Quién no sea parte del germen para el desarrollo de una historia que, al parecer, se desarrolla en clave policial. Como en Chicas muertas de Selva Almada, la instauración de la violencia se centra en lo doméstico y lo familiar, transformados en algo siniestro, que inundan la realidad. Mientras esperamos que la última novela de Piñeiro llegue a México –tomando en cuenta las dificultades relacionadas con la pandemia actual–, podemos buscar sus libros que han sido enviados o editados aquí con anterioridad. Que el diálogo inicie con Quién no.

Piñeiro, Claudia. Quién no, Alfaguara, Ciudad de México, 2018.