Dirección de Fomento a la Lectura

 

Los personajes de esta saga son complejos y evolucionan a cada momento, el autor, pone a prueba a cada uno, los obliga a avanzar, a enfrentar sus miedos más temibles o sus fobias. Lina Posada vivirá en dos años toda una vida o varias vidas, y casi perderá la única que sí tiene en medio de la aventura y habrá momentos en los que lamentará no haber muerto.

Con una imaginación calificada de “peligrosa” desde que era muy pequeño, Sandoval nos lleva a las profundidades de Infratierra, con espejos reflejantes, zarzuelas, habitaciones al revés y torres malditas, poco a poco presenta todo un mundo recreado con riqueza de detalles a través de la descripción.

De este modo, lleva al lector de la mano por Cimeria, el Castillo de los Pozafría, el Mercado del Colmillo e incluso a viajar a Entremundos, o el limbo, como le conoce la mayoría.

Esta historia asusta, duele, porque en medio de la ficción se asoman rasgos y situaciones tan reales que dan miedo, la ambición, la crueldad, el amor y el sacrificio se entrelazan para seducir al lector en medio de un mundo fantástico con chupasangres de “verdad”, muy a la mexicana.

Sobre el autor

Jaime Alfonso Sandoval es escritor y guionista especializado en literatura infantil. Estudió realización cinematográfica en el Centro Universitario de Estudios Cinematográficos (CUEC) en la Universidad Nacional Autónoma de México. Participó en el diplomado de creación literaria que ofrece la Escuela de Escritores y formó parte del taller de dramaturgia de Hugo Argüelles.

Su carrera como escritor inició en el teatro, pasó por el diario Reforma, para saltar del papel a la televisión, donde participó en diversos programas de canal 40, canal 11 y canal 22. Durante este periodo además de guiones siguió trabajando la literatura por lo que participó en el proyecto Biblioteca del Niño Mexicano y en libros de lectura de la Secretaría de Educación Pública.

En 1997, ganó el premio Gran angular con su primera novela El club de la salamandra. A partir de ese momento, su desarrollo como guionista fue de la mano con su trabajo como escritor.
Su desempeño en esa línea le ha ganado el reconocimiento de ser invitado al Salon du livre en París, en 2009, al Salón del Libro y la prensa de literatura infantil y juvenil de Montreuil, Francia, en 2011, a la Feria Nacional del Libro en Los Ángeles California y al festival Belles Latinas en Francia, en 2013.

Además del premio Gran Angular, obtuvo el premio de novela juvenil FeNal-Norma por la obra Operativo Nini; el Premio de Cuento de Ciencia para niños, con el texto Aldo y el Celular Maravilloso; Premio de Literatura Infantil El Barco de Vapor, por la obra Fantasmas, espectros y otros trapos sucios; y el Primer lugar en el Premio Nacional de Literatura Infantil, Castillo de la Lectura, entre otros.

Ha participado en múltiples libros de texto y antologías literarias. Entre sus libros destacan, El club de la Salamandra, La ciudad de las esfinges, Fantasmas, espectros y otros trapos sucios, y por supuesto, su saga Mundo Umbrío.