Dirección de Fomento a la Lectura

 

En efecto, después de dos intentos anteriores, se veía complicado cambiar aquella narrativa ominosa creada desde distintos grupos del poder para atacar y minar las intenciones del tabasqueño: obtener la victoria y más aún que ésta le fuera reconocida.

En esta obra, que parafrasea en pretérito perfecto simple el lema de campaña del ahora presidente de México, “Juntos haremos historia”, la maestra y política sinaloense narra su experiencia de una contienda llena de vicisitudes que, al igual que aquel muro, se había convertido en una quimera.

Ella sabía, por lo que vivió su padre (Manuel J. Clouthier, “Maquío”) en las elecciones de 1988, que el poder actuaba “para no permitir cumplir sus metas a las personas”.

Intuitiva frente a las artimañas políticas de “los adversarios” e ingeniosa para responderles, Clouthier registra en este libro varias de sus estrategias de comunicación que ganaron la simpatía y adhesión a la causa de miles y miles de usuarios(as) las de redes sociales, así como de blogueros(as).

“Parecíamos empleados del PRI”

Mucho antes de participar por segunda ocasión en la campaña de López Obrador, Tatiana ya había renunciado al Partido Acción Nacional (PAN), al cual había ingresado influenciada por su padre y cuya doctrina aprendió “por herencia”. La sinaloense consideraba que se habían alterado los principios del partido fundado, en 1939, por Manuel Gómez Morín (1897-1972), y que sus dirigentes actuaban al servicio del Partido Revolucionario Institucional (PRI): “me pude percatar de que las decisiones del partido pasaban primero por ese partido y luego nos ordenaban qué hacer acá (en el Congreso), cómo votar y qué argumentos presentar”.

Estaba desencantada, además, por la forma mercantil en que actuaban sus correligionarios en los procesos internos para elegir los candidatos a puestos de elección popular y en casos de investigación como fue el de uno de los hijos de la entonces Primera Dama,Sahagún: “Tanto a la diputada Malú Mícher como a mí nos llegada información en cascadas sobre el papel de los Bribiesca en los contratos con Petróleos Mexicanos,

pero en Acción Nacional decían: ‘Aquí no pasa nada, orden, orden, orden’. Nos trataban como si fuéramos pendejos (as)”.

La gota que derramó el vaso para abandonar el partido fue la respuesta de sus compañeros de bancada cuando en enero de 2005 se anunció el aumento de los salarios mínimos y de los(as) diputados(as). La desproporción entre ambos aumentos activó críticas en los medios de comunicación y en la sociedad. Esto hizo que se movilizara con otros panistas para reunir firmar para rechazar el incremento de salarios en el PAN. Muchos se opusieron a esta iniciativa. Uno le dijo: “Si no tienes nada mejor de qué hablar, mejor cállate”. De otro escuchó: “Necesito comprar un traje y a mí los 3 mil 500 pesos [de aumento] sí me sirven”. Así, después de estas reacciones, al tiempo que tomaba la decisión de renunciar, reflexionó: “Mis hijos están chicos y yo ando en friega dedicándole tiempo a esta bola de cabrones”.

“Muchos se sorprendieron al verme como coordinadora
de campaña de Andrés Manuel”

Aunque Tatiana ya había colaborado, sin exponerse a los medios, en el segundo intento de López Obrador para llegar a la presidencia del país, ahora, en 2018, estaba decidida a “dar la cara”. Hasta ese momento, ignoraba que el destino le deparaba una sorpresa pue el candidato de Morena la invitó a coordinar su campaña: “N’ombre, Andrés! No me vengas con eso”, le respondió.

Un año anterior, el aspirante por tercera ocasión al poder ejecutivo la había invitado a entrar de lleno a su proyecto político, y confiesa que ella se sentía incómoda: “Pensaba: ‘¡Qué flojera tener que dar explicaciones con mis hermanos!’ También me inquietaba cómo iba a encarar las críticas de mis amigos y vecinos de San Pedro Garza García, mi municipio, el territorio con la mayor fobia hacia López Obrador”.

Luego de la respuesta que, con emoción, le dio su marido cuando le platicó el ofrecimiento del tabasqueño, Tatiana aceptó imaginando que sólo saldría “en una que otra foto y ya”.

Sin embargo, después de la primera rueda de prensa, “todo cambió”: tuvo que renunciar a su vida privada y cortar de tajo sus ingresos: “No es que esté prohibido tener ingresos”, sino que la ambigüedad de la ley ponía en riesgo la campaña y a ella misma: “si te quieren fregar, te friegan”.

Cuenta que su integración a esa campaña “fue un acto de orgullo”, impulsada por su decisión “dar la cara”, narrativa ideada por Santiago Pando, quien “aportó mucha creatividad a la campaña”. Tatiana parte de la idea de que “las campañas tienen muchas madres”. Para ella, el triunfo de Andrés Manuel es obra de muchísimas personas. Destaca el papel de las redes sociales; de José Antonio Casillas, autor del slogan “Ya sabes quién”; y de quienes fungieron como bateadores en los distintos espacios mediáticos de noticias.

Juntos hicimos historia es una obra amena, en la cual su autora demuestra que México se pudo cambiar “por la vía pacífica y democrática” o, siguiendo la consigna de su padre, “sin odio y sin violencia”.

Sobre el autor

Tatiana Clouthier Nació en Culiacán, Sinaloa, en 1964. Es maestra, política y escritora. Varias veces se Se ha desempeñado como diputada federal; obtuvo la postulación, por la vía externa, para participar en los comicios de la presidencia de su municipio (San Pedro Garza García) y para la diputación local del Distrito 18 en Nuevo León, con candidatura independiente.

Fue coordinadora de la campaña electoral del actual Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador. Es la vicecoordinadora de la bancada del partido Morena en la Cámara de Diputados. Entre sus obras se encuentran: Crónica de un fraude anunciado (1992); Curul 206. Una visión del Congreso (2006); Maquío, mi padre (2007); y Juntos hicimos historia (2018).